El tratamiento del agua de las piscinas se realiza mediante la adicción de desinfectantes que elimines las partículas orgánicas que se pueden desarrollar, como son algas, bacterias y hongos. Este tratamiento se realiza mediante la adicción de productos químicos al agua como el cloro o el oxigeno activo, o bien mediante equipos que crean el propio desinfectante dentro de la piscina como es el clorador salino.
Tratamientos del agua más usuales
Aquí os indicamos sus principales características:
- Tratamiento con cloro: Es el más usado y más barato de los tratamientos. No es recomendado para uso en piscinas de niños ni de personas con piel sensible.
- Tratamiento con oxigeno: A pesar de ser más caro con respecto al cloro este tipo de tratamiento esta ganando popularidad debido a que es más respetuoso con la salud.
- Tratamiento con sal – cloración salina: Mediante un equipo convierte la sal previamente disuelta en el agua en cloro.
Ademas del tratamiento del agua principal de desinfección existen una serie de tratamientos secundarios que facilitan que el primero se realiza de una manera más optima, como puede ser;
- Control de pH: Para una mayor eficacia de los desinfectante el pH debe de encontrarse en un rango de entre 7,2 y 7,6.
- Antialgas: Ayuda a la acción del desinfectante atacando directamente a las algas, evitando que estas se reproduzcan ya que son unas de las principales señales de un tratamiento de las aguas incorrecto.
- Control de la concentración de cal. Los valores óptimos se encuentran entre 175 a 300 ppm. Valores altos de producen aguas turbias y manchas blanquecinas en el liner. Los valores bajos provoca que se oxide más rápidamente los compuestos metálicos como las escaleras de la piscina.
- Floculante: Los desinfectantes y antialgas antes mencionados inertizan los compuestos orgánicos, pero estos pueden quedar flotando en el agua debido a su pequeño tamaño. Para facilitar su eliminación, el floculante junta estas pequeños partículas flotantes y al crear un particular mayor ocasiona que puedan precipitarse al fondo de la piscina y ser recogidos mediante un limpiafondos.
Para realizar correctamente estos tratamiento hay que conocer el volumen de agua de la piscina, ya que en función de esta es con lo que se debe de dosificar la adicción de los productos de los distintos tratamientos. En el caso de desconocer dicho volumen, os dejamos una breve guía que indica como se calcula el volumen de vuestra piscina.